La clave para una manicura duradera está en su aplicación. Sigue estos pasos con cuidado para obtener tu manicura profesional desde la comodidad de tu casa.
Antes de aplicar las uñas Slēk, es importante tener las uñas limpias y sin esmalte.
Selecciona la uña que va mejor con cada dedo y apártalas en ese mismo orden.
Aplica una fina capa de pegamento en la uña Slēk y una generosa capa de pegamento en tu uña natural. Deja que las uñas absorban el pegamento durante 6 segundos.
Alinea la uña Slēk debajo de tu cutícula y presiona con tu pulgar durante 30 segundos. Asegúrate de hacer presión en toda la uña.
De ser necesario, customiza el largo y/o la forma de la uña con la lima o un corta uñas.
¡Disfruta tus Slēk!
Es un momento clave para la paciencia y el cuidado. Sigue los siguientes pasos y repítelos cuantas veces sea necesario para quitarte tus Slēk de manera adecuada.
Prepara un bowl con agua templada y jabón líquido.
Sumerge las manos durante
10-15 minutos.
Con el palo de naranjo, empuja suavemente la uña Slēk para levantar los lados. Cuando esté lista, la uña Slēk se desprender fácilmente.
Una vez quitadas, hidrátalas con aceite natural, preferiblemente para cutículas.
Para evitar daños y preservar tu set para siguientes usos, nunca fuerces ni arranques la uña Slēk.
Antes de ponerte las uñas Slēk, asegúrate de tener las uñas limpias y secas. Si tienes las uñas con aceite o crema, las uñas press-on pueden no pegarse bien.
Lima ligeramente tus uñas naturales antes de ponerte las uñas Slēk para igualar la superficie de trabajo.
Antes de ponerte el pegamento en la uña, pasa un algodón con alcohol por tu uña natural y la uña Slēk. Esto eliminará los residuos, y hará que absorban mejor el pegamento.
Para que te duren más las uñas Slēk pegadas, aplica pegamento en tu uña natural y en la uña Slēk.
Coloca la uña Slēk ligeramente debajo de tu cutícula para prevenir que se levante fácilmente, y mantenla presionada por 10 segundos.
*No dejar espacios sin aplicar pegamento, ya que puede entrar aire y hacer que no se peguen completamente.
Para quitarte las uñas Slēk, mete tus dedos en un cuenco con agua templada y jabón por 10-15 minutos.
Luego, quítatelas levantando suavemente los lados. Con este método, no estropearás tus uñas.
Si te queda pegamento restante en la uña, usa una lima de uñas o un palo de naranjo para raspar suavemente el pegamento.
Una vez eliminada la mayor parte, aplica quitaesmalte para limpiar cualquier residuo restante.
¿Te gustaron las uñas y te gustaría poder formar parte de nuestro equipo de embajadoras?
Recomienda Slēk a una amiga y ambas recibiréis un 15% de descuento.
Debes tener una cuenta para hacer una recomendación a un amigo.